¿QUE SON LOS TRASTORNOS DE LA CONDUCTA ALIMENTARIA Y COMO PREVENIRLOS?
Los TCA (Trastornos de la Conducta Alimentaria) se caracterizan principalmente por verse afectada la ingesta alimentaria (tanto por la no ingestión, como por el exceso) y donde hay una prevalencia en la obsesión por el control de peso. Se consideran de origen multifactorial, porque son un conjunto de causas: de origen biológico, psicológico, familiar y sociocultural, y provocan consecuencias para la salud tanto física como mental y social de la persona.
Es importante tener en claro: No son caprichos, No son etapas, No están queriendo llamar la atención.
Según datos de la Asociación de Lucha contra la Bulimia y la Anorexia (ALUBA), entre un 10 y un 15% de la población argentina tiene algún trastorno alimentario. Por otra parte, un informe de la Fundación La Casita, un centro especializado en trastornos de la conducta alimentaria (TCA), muestra que Argentina es el segundo país que tiene mayor cantidad de casos, después de Japón.
No solo se ve afectada la calidad de vida física y mental, sino también los círculos sociales, donde la detección temprana es fundamental para evitar la aparición y desarrollo del mismo. Las probabilidades de recuperación de un TCA aumentan cuando se detecta tempranamente, por lo que es importante estar alerta a los signos o “redflags”
- Saltear comidas o comer sólo muy pequeñas porciones. Se ve muchas veces que se cortan los pedacitos muy chiquitos en el plato. Atípica a la forma que anteriormente se alimentaba.
- Evidencia de atracones (por ejemplo: desaparición de grandes cantidades de comida del hogar). En diversidad o un mismo alimento. Por ejemplo comer y cocinar 1kg de arroz de forma rapida y descontralada es considerado un atracón, asi como 1/2 plato de arroz, dos chocolates, una manzana, 1 lt de café, etc. Es la forma (descontrolada) y el volumen lo que definen este signo.
- Indicios de conductas purgativas (por ejemplo: ir al baño siempre o casi siempre inmediatamente después de comer, provocarse vómitos, utilizar laxantes o diuréticos).
- Ejercicio excesivo con el fin de no aumentar de peso. “Después de la panzada del domingo, el lunes si o si doble turno de gym”.
- Hábitos de alimentación secretos, extremos o ritualizados (por ejemplo: masticar excesivamente, no permitir que los alimentos se toquen entre sí en el plato, cortar la comida muy pequeña, comer más lento que el resto de forma atípica para esa persona, con una finalidad determinada, ingerir un único grupo de alimento, etc.).
- Dietas restrictivas que se alternan con descontrol con las comidas. “empecé la dieta keto! En la semana todo bien, pero el finde…”
- Preocupación excesiva por el peso, la comida, las calorías, dietas y/o imagen corporal. “ hay que bueno que adelgazaste, estas mas linda”, “No comas ese alfajor porque engorda”.
- Dificultades para concentrarse.
- Actitud irritable, aislada, ansiosa y/o deprimida.
- Cambios de ánimo.
- Problemas de sueño.
- Aislamiento de círculos sociales, de amistades y/o de actividades habituales. “No quiero ir a la fiesta por que no me queda bien el vestido”, ” en el cumple de pepita siempre hay mucha comida, mejor no voy.”
- Incomodidad al comer frente a otras personas.
- Control constante de las medidas corporales en el espejo, (bodycheck, no siempre es la balanza muchas veces también se utilizan herramientas como centímetros, cinturones, ropa apretada, etc. Es lo mismo. No minimizar estas actitudes. )
- Oscurecimiento de los dientes.
- Dolores de estómago y otras quejas gastrointestinales como constipación o reflujo.
- Notables fluctuaciones de peso (subidas y bajadas).
- Mareos, desmayos.
- Frío constante.
- Lastimaduras y callos en los nudillos.
- Aumento del vello corporal
Puede ser abrumador ver a personas queridas atravesar un Trastorno de la Conducta Alimentaria o tener una relación complicada con su alimentación y/o imagen corporal. Sin embargo, es muy importante mantenerse a su lado y acompañar, ya que la red de apoyo tiene un lugar crucial en la recuperación. Encontrar la palabra correcta para cada momento no es siempre fácil, y no existe un manual que le sirva a todo el mundo. Es un desafío tanto para la persona atravesando un TCA, así como para su sistema de apoyo. Seguramente vas a encontrarte con que Recuperarse es un largo camino. Se trata de dar a un paso a la vez, confiando en el proceso.
La validación es súper importante cuando acompañamos en cualquier situación tanto como en el marco de un TCA.
Validar es:
Reconocer que sus emociones, pensamientos o comportamientos tienen una razón de ser. Ponerme en sus zapatos y empatizar con la sensación. Demostrar que te importa y entendés las circunstancias.
Validar no es: Estar de acuerdo. Aprobar
RESPETAR LOS TIEMPOS Y PROCESOS:
La recuperación de cada persona involucra tiempos, procesos y emociones distintas. Es importante respetar la cadencia de cambio de quien estás acompañando, sin comparar su historia con otros casos que hayas escuchado o visto en series y películas. RESPETAR LA SINGULARIDAD DE CADA PROCESO. Sin embargo, también es prudente prestar atención a que efectivamente existan avances y cambios, aunque parezcan mínimos, para saber que el tratamiento está funcionando. De ser así, observarás modificaciones en su peso, sus conductas, su ánimo y/o su actitud social
En nuestra sociedad se produce (y reproduce) un estereotipo hegemónico de belleza a través de los medios de comunicación, las redes sociales, los entornos escolares y familiares, e incluso en algunas consultas con profesionales de salud. La internalización de este modelo de belleza lleva a la insatisfacción con la imagen corporal.
Respetar la diversidad y luchar contra los mandatos sociales de belleza son aspectos que se deben tener en cuenta en las intervenciones enfocadas en la prevención de los TCA.
- Evitar comentarios sobre los cuerpos de otras personas, aunque lo hagas con intención amable. Es importante transmitir que la apariencia física no es lo primordial.
- Analizá tu consumo en redes sociales, revistas y medios de comunicación. Consumí contenido que te haga sentir bien con vos mismo/a y que no promueva la comparación con otras personas.
- Valorar características que no tengan que ver con la apariencia. La personalidad, los valores y el talento son cuestiones mucho más interesantes. Esto refuerza la idea de que hay cosas más importantes en la vida que la imagen.
- Promover hábitos saludables relacionados con la alimentación, como por ejemplo:
- Realizar cuatro comidas diarias, no saltearse comidas.
- Comer cuando se tiene hambre y dejar de comer cuando se siente saciedad. Es importante que comer sea la respuesta al hambre y no un recurso de regulación emocional para disminuir el estrés o calmar la angustia.
- Apagar la televisión a la hora de comer, ya que permite tomar conciencia de lo que se está ingiriendo y así comer porciones medidas.
- Incluir variedad de comidas. No hay tal cosa como alimentos buenos o malos. Deben incluirse frutas, verduras y en ocasiones también chocolates y alfajores sin prohibir alimentos.
- No utilizar alimentos como premio o castigo: cuando lo hacemos generamos una relación conflictiva con la comida
- Impulsar una actitud crítica respecto a los mensajes de nuestra cultura audiovisual. No es anecdótico que el 99,9% de las imágenes de revistas de espectáculos y moda estén retocadas con Photoshop, o que la televisión sólo muestre cuerpos delgados, blancos y tonificados.
- Fomentar hábitos saludables relacionados con el ejercicio físico. No debe verse como una compensación por haber comido mucho, sino un momento placentero para movernos, despejarnos y conectarnos con nuestro propio cuerpo
- Anticipar y conversar sobre los cambios del cuerpo en la adolescencia. En ese período, se modifica el tamaño del abdomen, se ensanchan las caderas y crecen los pechos. Es parte de los cambios que se dan en nuestros cuerpos con el paso del tiempo y es esperable que así ocurra.
- Celebrar la diversidad de los cuerpos y trabajar el gordo-odio y la discriminación estética en la escuela.
Dato útil:
Si tenes un trastorno alimentario o alguien en tu circulo cercano esta atravesando por una situación similar existe una ley que te protege. Garantiza que tu obra social cubra un tratamiento integral y te ampara frente a la discriminación.
ARTICULO 15. — Quedan incorporadas en el Programa Médico Obligatorio, la cobertura del tratamiento integral de los trastornos alimentarios según las especificaciones que a tal efecto dicte la autoridad de aplicación.
ARTICULO 16. — La cobertura que deberán brindar todas las obras sociales y asociaciones de obras sociales del Sistema Nacional incluidas en la Ley Nº 23.660, recipiendarias del fondo de redistribución de la Ley Nº 23.661, las demás obras sociales y organismos que hagan sus veces creadas o regidas por leyes nacionales, y las empresas o entidades que presten servicios de medicina prepaga, conforme a lo establecido en la Ley Nº 24.754, incluirá los tratamientos médicos necesarios, incluyendo los nutricionales, psicológicos, clínicos, quirúrgicos, farmacológicos y todas las prácticas médicas necesarias para una atención multidisciplinaria e integral de las enfermedades.